Sistemas de riego

Con los sistemas de riego, puedes simplificar o automatizar el trabajo de riego y así ahorrar agua y trabajo.

Diferentes sistemas pueden ser útiles en el jardín:

Riego por goteo

Con el riego por goteo, las mangueras se colocan en los lechos o se entierran a poca profundidad. A continuación, el agua gotea directamente sobre el suelo, por encima de la zona de las raíces, desde salidas especiales colocadas a intervalos regulares.

Este método ahorra mucha agua y es muy cómodo una vez instaladas las mangueras.

Riego por goteo

Riego con botella de agua

Con este método, las botellas estables (de PET o de vidrio) se llenan de agua y luego se introducen en el suelo junto a las plantas con la abertura primero. En cuanto la tierra alrededor de la abertura de la botella esté saturada de agua, no entrará más agua. Se forma un tapón de tierra húmeda en la apertura de la botella. Sólo cuando la tierra se seca puede volver a salir el agua. Dependiendo del tipo de suelo, experimenta con los tamaños de apertura de la botella.

Este método es muy barato porque no hay que comprar ningún material. Sin embargo, el llenado de las botellas supone mucho trabajo manual para las zonas más grandes. Es adecuado cuando no es posible regar durante un periodo de tiempo prolongado, por ejemplo, cuando te vas de vacaciones durante unos días.

Riego con botella de agua

Riego con ollas de barro

Con este método, se entierran grandes macetas de arcilla junto a las plantas sedientas, se llenan regularmente y se tapan. El agua se filtra lenta y uniformemente a través de los poros de la arcilla.

Riego con ollas de barro

Método de succión

Con este método, se coloca un cubo de agua ligeramente elevado junto a las plantas. Se humedece un trapo viejo y se cuelga un extremo. El otro extremo se entierra en la zona de las raíces de las plantas. Esto mantiene la tierra ligeramente húmeda.

Método de succión

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